En un intento sin precedentes de resolver la crítica situación de salud y saneamiento básico en la región del Bajo Atrato, una Audiencia Pública se llevó a cabo este viernes 4 de agosto. El coliseo municipal de Riosucio fue el escenario de este encuentro, donde las autoridades locales y nacionales se dieron cita para discutir y proponer soluciones viables a estos problemas que han asolado la región durante años.
La reunión fue organizada por los congresistas del Partido Comunes y la coalición Pacto Histórico. Entre los asistentes estaban líderes comunitarios, representantes de la Agencia para el Desarrollo Rural, la Secretaría de Salud Departamental, el Alcalde de Riosucio, y representantes de la fuerza pública. La diversidad y amplitud de las partes interesadas subrayan la gravedad de la situación y la necesidad urgente de soluciones sostenibles.
La agenda de la Audiencia Pública abordó temas que impactan directamente la calidad de vida de los residentes de Bajo Atrato. La falta de servicios públicos esenciales, como el agua potable y el alcantarillado, así como el acceso a la atención médica, fueron discutidos en profundidad. Asimismo, se consideró la situación de las viviendas de los damnificados del incendio del 28 de noviembre de 2020 en Riosucio.
Entre las soluciones propuestas, destacaron la construcción de un nuevo hospital regional y la pavimentación de los tramos de carretera que aún están pendientes en la ruta entre Caucheras y Riosucio. Estas medidas tienen como objetivo mejorar tanto la infraestructura de salud como la conectividad de la región, aspectos cruciales para el desarrollo y el bienestar de sus habitantes.
Sin embargo, las promesas y propuestas deben ir acompañadas de acciones reales. En este sentido, los líderes comunitarios hicieron un fuerte llamado al gobierno y a sus instituciones para que presten mayor atención a estos problemas y cumplan con los compromisos asumidos en el Acuerdo de Paz, en particular en lo que respecta a los cultivos ilícitos.
La Iglesia Católica, una presencia constante en la región, también se unió a este llamado. El misionero claretiano Marcial Gamboa instó a las autoridades a que conviertan la solución a la falta de servicios públicos en una prioridad, especialmente en estos territorios tan golpeados por el conflicto armado.
Las comunidades del Bajo Atrato, tras años de olvido y lucha, esperan que las soluciones discutidas durante la Audiencia Pública no queden en letra muerta. En un territorio marcado por promesas incumplidas, el compromiso demostrado en esta reunión debe convertirse en un camino hacia una vida mejor. La urgencia es innegable, y el tiempo para actuar es ahora.
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