En una iniciativa pionera que promete transformar el sector agropecuario en Chocó, el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) del departamento, en colaboración con la empresa local ‘Agropiscícola Tadó’, ha lanzado un proyecto de investigación destinado a la producción de concentrados artesanales de alto valor nutricional para la alimentación animal. Este proyecto se enmarca dentro de los programas AGROSENA y SENNOVA, y busca aprovechar eficientemente los productos agropecuarios locales, contribuyendo a la economía circular y al fortalecimiento de las empresas campesinas en la región.
El objetivo principal de la colaboración es fomentar la valorización de los recursos naturales del Chocó, incentivando la producción y comercialización local, lo que a su vez generará oportunidades de empleo y desarrollo económico sustentable en el departamento. Este esfuerzo conjunto no solo beneficia al sector agropecuario, sino que también se perfila hacia la obtención de una patente y el establecimiento de la primera empresa de alimentos balanceados para animales en Chocó.
Adriana Cristina Ulloa Riaño, profesional de AGROSENA, destacó la importancia del proyecto, mencionando que “beneficiará a más de 2 mil campesinos del Chocó involucrados con el sector agropecuario, quienes suministrarán materia prima de alta calidad”. Además, el proyecto enfatiza el aporte científico y la propiedad intelectual del SENA, promoviendo la investigación entre aprendices y la comunidad educativa.
Por su parte, Ricardo Perea García, propietario de ‘Agropiscícola Tadó’, compartió su entusiasmo respecto al impacto positivo del proyecto en la agroindustria local. Subrayó que el desarrollo de los animales alimentados con el concentrado artesanal muestra mejoras significativas en términos de crecimiento, color y sabor de la carne, en comparación con los concentrados comerciales habituales.
El proyecto ha implicado rigurosas pruebas con peces como cachamas y tilapias, alimentándolos con el nuevo concentrado artesanal versus uno comercial, durante un periodo de seis meses. Los resultados preliminares indican un rendimiento superior de los animales alimentados con el producto artesanal, validando la viabilidad de este innovador enfoque.
“Estamos trabajando con materias primas locales como la harina de chontaduro, maíz, yuca, popocho, matarratón, hojas de plátano y grasas animales naturales”, explicó Perea García, enfatizando el compromiso del proyecto con la utilización de recursos naturales y sostenibles del departamento del Chocó.
Este proyecto no solo es un testimonio del potencial de la colaboración entre el sector público y el privado para innovar en la industria agropecuaria, sino que también representa un paso adelante hacia el desarrollo económico y la sostenibilidad ambiental en Chocó.
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