En el casco urbano del municipio de Riosucio, una situación crítica se ha desarrollado durante los últimos tres días, tras el hallazgo de un cadáver de sexo masculino no identificado, abandonado en la morgue municipal. La morgue, careciendo de un cuarto frío y sin cumplir con los estándares mínimos para el manejo de cuerpos, ha sido el escenario de un alarmante estado de descomposición del cadáver.
Los residentes del barrio Makent, cercano a la morgue, están sufriendo graves incomodidades debido al avanzado estado de descomposición del cuerpo. El olor fétido se ha convertido en una fuente de angustia y desesperación para la comunidad, al punto de que algunos vecinos han optado por mudarse temporalmente a otros sectores, mientras que otros, sin alternativas de reubicación, enfrentan la situación en sus hogares junto a niños y personas mayores.
El cadáver, encontrado flotando en el río Atrato y posteriormente recuperado por efectivos de la armada nacional, permanece sin identificar. Esta circunstancia ha intensificado el dolor y la tristeza de la comunidad, que lamenta el abandono y la falta de respeto hacia el difunto.
Esta situación ha generado un llamado urgente a las autoridades competentes para que intervengan. Los residentes de Riosucio y del barrio Makent instan a las autoridades a tomar medidas inmediatas para la identificación del cuerpo y su posterior sepultura digna, resaltando la necesidad de respetar la dignidad humana incluso después de la muerte. La comunidad espera una respuesta rápida y efectiva para resolver esta crisis sanitaria y devolver la tranquilidad al sector.
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