La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) ha extendido su misión de búsqueda y recuperación de cuerpos de posibles víctimas de desaparición forzada en el cementerio de Carepa, Urabá antioqueño. Esta decisión forma parte de las medidas cautelares implementadas desde julio pasado, que también incluyen el cementerio de Mutatá, en un esfuerzo por proteger los restos de víctimas del conflicto armado colombiano.
Las labores de búsqueda, que se iniciaron entre el 28 de agosto y el 1 de septiembre, se reanudarán desde el 9 hasta el 17 de noviembre, con el objetivo de recuperar estructuras óseas y avanzar en su identificación. La JEP, junto con el Grupo de Apoyo Técnico Forense (GATEF) de la Unidad de Investigación y Acusación (UIA), trabajará en la exhumación y análisis de los restos, que serán entregados al Instituto Nacional de Medicina Legal para su identificación.
Esta intervención en Carepa es crucial en el marco del Caso 04 de la JEP, que investiga los efectos del conflicto armado en Urabá. Según testimonios, se cree que en este cementerio fueron enterradas personas asesinadas durante el conflicto y presentadas como bajas en combate, sin identificación adecuada.
Entre el 14 y el 17 de noviembre, se realizarán jornadas integrales con los familiares de las posibles víctimas, incluyendo la toma de muestras y asesoría jurídica y sicosocial, con la participación de diversas instituciones. Estas acciones buscan no solo identificar a las víctimas, sino también ofrecer una sepultura digna y brindar un cierre a sus familias. La JEP continúa su compromiso con la protección y dignificación de las víctimas del conflicto armado en Colombia.
Somos Notiriosucio, llámanos o escríbenos al 3218365504.
