Como consecuencia de las intensas lluvias propias de la temporada, entre el 7 de abril y el 26 de mayo, al menos 26.749 personas (7.436 familias) de comunidad indígenas y con mayor énfasis en afrodescendientes pertenecientes a 20 municipios (Medio Atrato, Quibdó, Medio Baudó, Litoral del San Juan, Riosucio, Carmen del Darién, Unguía, Nóvita, Rio Quito, Istmina, Bajo Baudó, Tadó, Bojayá, Lloró, Cértegui, Bagadó, Acandí, Atrato, Medio San Juan y el Cantón de San Pablo) del Chocó, han resultado damnificadas tras diversas inundaciones y vendavales. Se requiere apoyo desde el nivel nacional, por parte de los clústeres, organizaciones y autoridades que puedan tener capacidad, dada la magnitud de población afectada y los vacíos de respuesta por parte de las entidades locales y departamentales.
En el caso de Rio Quito y Tadó no se reportan personas afectadas pero sí daños estructurales en vías y destrucción parcial en puentes; de otro lado, 3 personas fallecieron por deslizamientos en el Carmen de Atrato, 172 hectáreas de cultivo destruidas, 6 instalaciones de puestos de salud fuera de servicio por las afectaciones en Unguía y Atrato. En total 561 viviendas averiadas, 14 viviendas destruidas y tres instituciones educativas afectadas.
A la fecha, únicamente los municipios de Unguía y Atrato han completado la Evaluación de Daños y Análisis de Necesidades (EDAN). Sobre las personas que tuvieron afectaciones en sus viviendas, se reporta solo un albergue temporal en la escuela principal del municipio de Acandí (otras personas con afectaciones en viviendas se encuentran en casas de familiares).
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