En medio de la falta de agua apta para el consumo humano, energía eléctrica, y un evidente estado pobreza visitamos a la señora Senaida María Solano una humilde campesina desplazada por la violencia del municipio de Riosucio quien vive con su esposo, su madre y tres menores de edad.
En la invasión conocida como el 24 de febrero frente a la nueva urbanización el paraíso está ubicada su vivienda para llegar a ella toca pasar por improvisados y deteriorados puentes. A su alrededor pocas casas pero distanciadas unas de otras comparten este enorme lote al lado donde se debió construir el matadero en la administración del señor Eulalio Lemos.
Pero el motivo de nuestra visita en esta oportunidad no era el avistamiento de elefantes blancos, en esta ocasión al parecer una especie animal aún sin identificar, tiene atemorizada a Senaida María, su familia y vecinos.
La amenaza proviene del río Riosucio que hoy está convertido prácticamente en un canal de aguas estancadas pero que aun así es utilizado por los habitantes de este sector.
Desde nuestro medio de comunicación hacemos un llamado a las autoridades a tomar las medidas pertinentes con esta situación, a la ciudadanía a tener las precauciones para evitar incidentes lamentables en la comunidad.
“Entrevista de la menor autorizada por Senaida Maria Solano”